En la Ciudad de La Paz, el primero de diciembre no paso desapercibido, puesto que organizaciones gubernamentales, Fuerzas Armadas y ONG entre ellas la Asociación Para la Prevención de Embarazos no Deseados (APPRENDE); realizaron una marcha celebrando el Día Mundial de Lucha Contra el VIH/Sida, el objetivo de esta movilización fue sensibilizar a la población paceña para evitar la propagación del VIH/Sida con el lema: “Me cuido, te cuido”.
Esta actividad concluyo con una Feria en la plaza del Bicentenario, donde APPRENDE ejecutó una campaña informativa con soporte de material educativo.
La Dra. Teresa Gonzales, Supervisora Nacional de Apprende manifestó “estar informados y sensibilizados es nuestra mejor arma contra el VIH/Sida y la adopción de las medidas de prevención correspondientes”.
Gonzales, respondió algunas preguntas frecuentes sobre el VIH/Sida.
¿Qué es el SIDA?
El Síndrome de Inmuno Deficiencia Adquirida (SIDA) es una enfermedad causada por el Virus de Inmuno Deficiencia Humana (VIH) que se puede transmitir a través de las relaciones sexuales con una persona que viva con el virus, por la transfusión de sangre o uso de objetos corto-punzantes contaminados con el virus y de una madre que vive con el VIH a su hijo/a durante el embarazo, el parto y/o la lactancia.
Las personas que adquieren el VIH pueden vivir mucho tiempo con el virus sin tener síntomas, ni desarrollar el SIDA o sea la enfermedad, pero pueden transmitir el VIH a otras personas.
El VIH ataca el sistema inmunológico, que es el sistema encargado de defender a las personas de los organismos infecciosos (virus, bacterias, hongos, parásitos, etc.) y los deja vulnerables a contraer infecciones y/o desarrollar algunos tipos de cánceres, muchas veces mortales.
¿Cómo se transmite?
El VIH se transmite de una persona que vive con este virus a otra, a través de las relaciones sexuales (vaginales, anales y/u orales).
El VIH no sólo se transmite por vía sexual, también puede ser transmitido a través de una transfusión de sangre y del uso de objetos corto-punzantes, como agujas, bisturís, piercings, cuchillos, etc.
Las madres que viven con el virus también pueden transmitirlo a su hijo/a durante el embarazo, el parto y la lactancia.
Hay otras formas de transmisión poco comunes como una lesión accidental con una aguja (especialmente el personal de salud), inseminación artificial con semen donado contaminado con el virus y a través de trasplantes de órganos.
¿Qué síntomas produce?
El VIH
Las personas que adquieren el VIH pueden estar sin síntomas por mucho tiempo, inclusive años, aunque no estén tomando medicamentos. Este período asintomático varía de una persona a otra.
Cuando una persona adquiere el VIH, generalmente presenta síntomas parecidos a una gripe, como dolores en el cuerpo, malestar general, fiebre alta y además manchas rojas en la piel y aumento del tamaño de los ganglios. Los síntomas aparecen entre 5 a 30 días después de la exposición al virus. No todas las personas tienen la misma sintomatología.
Es muy importante el diagnóstico precoz del VIH mediante un examen de sangre porque las personas que tienen el virus requieren recibir orientación y atención integral de un equipo de salud capacitado. Además, es importante que el médico/a determine si es apropiado o no iniciar una terapia con medicamentos, que se llaman antirretrovirales. Un tratamiento adecuado pueden ayudar a las personas a vivir por muchos años o toda su vida sin manifestar nunca el SIDA.
Si el sistema inmunológico y/o los medicamentos antirretrovirales no logran controlar la multiplicación del VIH en el organismo, el virus ataca el sistema inmunológico y este disminuye la producción de los linfocitos T-4 o CD4, que son células que defienden al organismo. Cuando esto ocurre, las personas empiezan a tener los síntomas del SIDA.
El SIDA El SIDA puede manifestarse de muchas maneras desde la aparición de una infección leve hasta un cáncer, pero no se manifiesta de la misma forma en todas las personas.
En general los primeros síntomas son comunes y semejantes al de otras enfermedades, como, dolor de cabeza, malestar general, dolor muscular, agotamiento prolongado, pérdida del apetito, baja de peso, diarrea, estitiquez, fiebre persistente, calofríos, ganglios inflamados, tos, dolor de garganta y resfriados.
A medida que avanza la enfermedad y el sistema inmunológico va siendo más afectado, aparecen otras infecciones oportunistas (infecciones que no aparecerían con un sistema inmunológico normal), como infecciones por hongos recurrentes (que se repiten), frecuentes y que no se curan con los antibióticos habituales, tuberculosis, neumonía, algunos tipos de cáncer (Sarcoma de Kaposi), infecciones del sistema nervioso (meningitis), entre otras.
Aunque el SIDA se considera una enfermedad incurable, el uso de medicamentos antiretrovirales y otros tratamientos para cuidar la salud integral de las personas ha logrado mejorar la calidad de vida y el pronóstico de la enfermedad.
¿Cómo se hace el diagnóstico?
El diagnóstico del VIH se realiza mediante un examen de sangre para detectar anticuerpos anti-VIH, llamado prueba o test de ELISA. Si esta prueba es positiva, se aconseja realizar una segunda prueba de ELISA y confirmar el diagnóstico, haciendo el test de Western Blot. Este test es más sensible y define con más precisión la presencia de anticuerpos anti-VIH en la sangre. Sin embargo, como es un test que exige ciertas condiciones técnicas más avanzadas, sólo se realiza para confirmar el test de ELISA. Estos exámenes sólo se pueden realizar si la persona acepta en forma conciente, voluntaria e informada a que se le practiquen.
¿Dónde realiza el test de ELISA?
El Test de Elisa se realiza en la mayoría de los laboratorios y clínicas privadas, y centros de salud y hospitales públicos. También lo realizan en algunos centros especializados como en INLASA SELADIS, etc..
¿Cómo se trata?
No existe hasta ahora un tratamiento que cure el SIDA, pero se han desarrollado drogas llamadas antirretrovirales que inhiben la replicación del VIH en el organismo y por lo tanto ayudan a que el sistema inmunológico mejore su producción de linfocitos T, que son las células que defienden al organismo de infecciones. La terapia antirretroviral puede ayudar a retardar el progreso de la enfermedad y mejorar la calidad de vida de las personas que viven con el virus.
Todos los medicamentos que se usan en la terapia antirretroviral tienen efectos secundarios. Los efectos secundarios comunes a la mayoría de los medicamentos son: dolor de cabeza, nauseas, cansancio, malestar general y acumulación de grasa en la espalda y abdomen, entre otros.
Estos medicamentos también pueden afectar el metabolismo de las grasas y aumentar el riesgo de presentar una enfermedad cardiovascular a largo plazo.
Es importante que los antirretrovirales sean prescritos por un medico/a capacitado. Además las personas que toman estas drogas requieren ser controladas y evaluadas periódicamente.
Las infecciones oportunistas y otras enfermedades que se presenten, deben tratarse específicamente.
Es importante además que las personas que viven con el VIH/SIDA lleven una vida sana, sigan una dieta alimenticia equilibrada, eviten al alcohol y el cigarrillo, hagan actividades físicas y busquen tratamientos complementarios que les ayuden a mejorar su calidad de vida.
¿Cómo se puede prevenir?
El VIH/SIDA se puede prevenir usando condón masculino o condón femenino en forma correcta y en todas las relaciones sexuales, además su uso protege de otras infecciones de transmisión sexual. El condón se debe usar siempre porque el VIH se puede transmitir aunque la persona este sin síntomas.
El VIH/SIDA también se puede prevenir haciendo abstinencia total y permanente o teniendo relaciones sexuales mutuamente monógamas, siempre y cuando ambas personas estén sanas.
Otras formas de prevención son el uso de transfusiones de sangre que provengan de bancos de sangre que garanticen su seguridad y uso de objetos corto-punzantes sólo esterilizados.
Las madres que vivan con el virus tienen derecho al acceso gratuito a la terapia con antiretrovirales que disminuyen el riesgo de transmitir el virus durante el embarazo y parto a su hijo/a. Para evitar la transmisión del virus durante la lactancia, el recién nacido/a debe alimentarse con leche artificial, y debe suspenderse la lactancia materna.