EL DATO CORRESPONDE A LA CIUDAD DE EL ALTO
Las estadísticas muestran que apenas el 4% de estos casos acaba con una sentencia judicial.
Entre enero y junio de este año, los organismos correspondientes de la ciudad de El Alto registraron 400 casos de violación a menores, según un reporte de la Defensoría del Pueblo.
En el 10 por ciento de esos hechos, las víctimas tienen entre 13 y 17 años y lo que es peor, aún viven con sus agresores, debido a que éstos son familiares cercanos, informó el representante de la Defensoría alteña, Pueblo, José Luis Hidalgo.
"Son víctimas de algún familiar y continúan viviendo en el mismo seno del hogar pese a lo ocurrido. Se debe a que la familia transa, perdona u oculta las acciones del agresor, en contra de los derechos de los agredidos".
Según Hidalgo, incluso cuando las víctimas denuncian lo ocurrido, la madre o los familiares no les creen o les acusan de pretender la disgregación del hogar con la salida de progenitor o el familiar agresor.
Por esa razón, algunas niñas y niños huyen de la casa o, finalmente, se resignan a vivir en el mismo lugar en que fueron abusados sexualmente.
Informe de la defensoría municipal. Por su parte, la responsable de la Defensoría de la Niñez y Adolescencia (DNA), Ana Callisaya, coincidió con los datos presentados por el Defensor del Pueblo de El Alto y dijo que cuando se detecta que un menor es víctima de agresiones sexuales dentro de su hogar, lo ideal es apartarlas del entorno en el que viven porque corren el riesgo de continuar como víctimas. Explicó que en los casos en los que el encubrimiento es mayor es en áreas rurales.
Según Callisaya e Hidalgo, el 80 por ciento de los agresores sexuales de menores proviene del entorno familiar. Generalmente se trata de tíos, primos, hermanos padrastros e, inclusive, los padres consanguíneos.
Estadística estremecedora. Un informe de la Defensoría del Pueblo de La Paz indica que de 14.000 casos de violencia sexual en contra de menores registrados en todo el país, sólo el 4% fue objeto de un proceso penal que concluyó con una sentencia, debido a que se carece de mecanismos para aplicar las leyes que favorecen a las víctimas.
Éstas, señala el reporte, chocan con un aparato policial que no colabora en la medida esperada.
Las autoridades que trabajan en defensa de los derechos de los menores coinciden en señalar que la violencia se acepta como un acto natural, al extremo de que se denuncian estos hechos, sólo cuando la víctima corre riesgo de muerte o cuando hubo agresiones psicológicas, verbales o sexuales en forma constante.
EL ABUSO SEXUAL INFANTIL. Según las autoridades que trabajan a favor de la niñez, se considera como abuso sexual infantil a cualquier actividad realizada sin consentimiento, con o sin violencia, con o sin contacto físico con un menor, por una persona de cualquier edad, con el propósito de obtener placer sexual.
Generalmente, se concibe a la prevención del abuso sexual infantil en el sentido de que los menores no sean víctimas sin tener en cuenta la perspectiva del agresor. Entonces para prevenir es importante desarrollar elementos que habiliten a niños y niñas para la protección ante situaciones de abuso sexual y no sexual, así como desarrollar elementos que predispongan a niños y niñas a evitar prácticas de abuso sexual y no sexual con los demás.
16 niños, en promedio, son violados cada día en Bolivia, según datos del Defensor del Pueblo.
"El abuso sexual es un hecho que ocurre mucho más de lo imaginado, por eso es importante la prevención. Particularmente, mi mensaje a las madres es que escuchen con atención lo que les dicen sus hijos y asumir acciones que correspondan". José Luis Hidalgo - DEFENSOR DEL PUEBLO
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