Videos Apprende

viernes, 5 de agosto de 2011

Alrededor del 50% de parejas de enamorados experimentan una etapa violenta

Datos recopilados dentro del proceso de capacitación que lleva adelante la Institución Católicas por el Derecho a Decidir, determinaron que, en diversas etapas y a diferentes edades, por lo menos un 50% de adolescentes y jóvenes habrían, en algún momento de su relación afectiva, experimentado situaciones violentas físicas, verbales y psicológicas.
A decir de la coordinadora del área de educación y capacitación de esa institución, Virginia Aramayo, existe un alto índice de enamoramientos violentos durante la etapa adolescente y juvenil, producto de un entorno familiar conflictivo y de la perdida, cada vez mayor, de valores al interior de la sociedad.
La violencia está presente en, por lo menos, un 50% de los enamoramientos porque lo hemos hecho natural, desde que somos niños y niñas, desde el momento en que a veces, sin darnos cuenta, nuestros papas y mamas nos dan un cocacho, son dan un jalón o desde que nos dicen que no servimos para nada, esas actitudes se replican en las relaciones de parejas, afirmó Aramayo.   
Por su parte, Lucia Sauma, secretaria técnica de la campaña Punto Final, Bolivia libre de violencia del Centro de Investigación y Desarrollo de la Mujer CIDEM, afirmó que es necesario sensibilizar a la población (tanto adolescente, como joven), para evitar hechos de maltrato, debido a que como resultado de cada situación negativa, el circulo de agresión continúa y se mantiene hasta llegar a la madurez.
A decir de la activista, es necesario mejorar los niveles de comunicación tanto al interior de las familias como en el entorno de pareja, además de denunciar y hacer frente a situaciones de violencia para evitar que sean recurrentes. Necesitamos saber que todos tenemos derecho a vivir sin violencia y darnos cuenta que ese es un derecho que tenemos que defenderlo,  tenemos que denunciar cuando hay casos de violencia, no llegar al feminicidio por ejemplo, aseveró. 
Varios estudios a nivel internacional y nacional determinaron que más del 90% de las situaciones de violencia entre parejas es producto de dos factores, los celos y el excesivo control, ambas actitudes ejercidas en demasía se convierten en un detonante que genera conflictos verbales y físicos que se constituyen en comunes.
A nivel regional
Según información del Servicio de Noticias de la Mujer de América Latina y el Caribe (SEMLAC), en México, Colombia, Perú, Guatemala, Bolivia, Argentina, Venezuela, Dominicana, Uruguay y Chile, entre el 50 y 70% de las mujeres fueron golpeadas y amenazadas por su esposo, novio o ex novio.
Según la Asamblea General de las Naciones Unidas, se reconoce a la violencia de género como: “Todo acto de violencia hacia el sexo femenino que tenga o pueda tener como resultado un daño o sufrimiento físico, sexual o psicológico para la mujer”. Esto incluye las amenazas, insultos y privaciones, tanto si se producen en la vida pública como privada. Pero las adolescentes que sufren estas agresiones en las relaciones de pareja no formales no las perciben como tales, ni ellas ni sus novios. Pero si se permite, del reclamo y los comentarios se pasa a los insultos, de éstos a los golpes, y luego al sometimiento.
Problemática
La violencia de género está vinculada a los matrimonios, pero en los noviazgos adolescentes también ocurren. La diferencia es que en una relación entre adultos, existe una unión legal y en muchos casos hay hijos en el medio. Pero chicos de entre 15 y 20 años que podrían alejarse de la persona violenta con mayor facilidad tampoco lo hacen y la mayoría de las veces esto lleva a una situación de maltrato que no termina nunca.
Desde los 15 años y hasta la vida en pareja las personas comienzan a aprender y ensayar nuevas formas de comportamiento, que adoptan en su vida futura. Por este motivo un noviazgo violento, si no se termina, deriva en un matrimonio violento. Además de los “malos momentos”, las consecuencias de esta violencia son la depresión, baja autoestima, aislamiento, fracaso escolar y bajo rendimiento laboral.
Las chicas no denuncian el maltrato, porque sienten que no es tan grave y no quieren contarle a sus padres o amigas por temor a que la alejen de su novio (porque sienten que lo aman), lo más probable es que terminen acostumbrándose a la situación, y termine en un caso de violencia más serio.
Publicado por GAIA Noticias

No hay comentarios:

Publicar un comentario